miércoles, septiembre 26, 2007

¿El camino hacia la cultura?

«Nunca digas de este agua no beberé». Así reza el viejo dicho popular. Pero uno siempre tiene meridianamente clara una serie más o menos abstracta de cosas que está seguro que nunca hará (voluntariamente, claro). Por ejemplo: Nunca me haré mechas rubias ni me dejaré el pelo largo, nunca me tatuaré un amor de madre en el bíceps, nunca me bañaré en una piscina rodeado de tiburones... y nunca leeré un libro de César Vidal, y mucho menos un libro de César Vidal titulado «El camino hacia la cultura». Lean la reseña que hace la propia editorial Planeta...


«El camino hacia la cultura»
Lo que hay que leer, ver y escuchar.




Desde los inicios de la cultura hasta la actualidad, César Vidal nos sumerge en un viaje por la historia, la literatura, el arte y la ciencia de la humanidad. En un relato apasionante, nada escapa a su atención. Nos habla de la música de cada época, del arte y de la arquitectura, de la poesía y de la pintura...Nos habla, en suma, de todo cuanto vale la pensa saber. Para los amantes de las clasificaciones, Vidal nos ofrece sus listas de los mejores libros o las mejores composiciones musicales. Esas listas, distribuidas a lo largo de la narración, ayudan a conformar el canon del conocimiento y el arte humanos. Hombre de extrema erudición, nadie mejor que César Vidal para conducirnos en esta aventura del saber. Esta obra, la más ambiciosa de cuentas ha emprendido hasta la fecha, está destinada a convertirse en todo clásico.

Dejando a un lado el hecho de que este señor me cae especialmente gordo (no en vano, pesará más del doble que yo –cosa que tampoco tiene mucho mérito-), la verdad es que sus ideas y sus posturas radicales y ultraconservadoras (probablemente gran parte de ese conservadurismo sea sólo de boquilla), esas ideas defendidas siempre desde su obcecado fanatismo, no las comparto pero al menos las tolero, cosa que él no podrá decir nunca, pues ni tolera ni respeta a nadie que defienda posturas contrarias a las suyas, ya que si por algo se caracteriza este señor es precisamente por esa repugnante falta de consideración hacia quien no opine como a él le gusta que se opine. Así lo pone de manifiesto diariamente en prensa, radio y televisión.

El colmo es que un Don Nadie de las letras hispánicas cometa la temeridad de escribir un libro con el propósito de cultivarnos con su sapiencia, como si alguien como él fuera la persona más indicada para transmitir el saber y la cultura. Sr. Vidal, deje que la gente normal y corriente aprenda la cultura a su marcha, que no hay nada más hermoso y satisfactorio que descubrir por uno mismo la cultura; que el ser humano y cada individualidad está dotada de criterio y de una particular curiosidad que le impulsa a aprender lo nuevo, que le hace querer saber más de una cosa y de la otra también, aceptando los consejos puntuales de quien manifiesta tener mayor grado de conocimiento. Pero nunca, jamás de los jamases, siguiendo como un borrego una guía escrita desde la prepotencia del eruditismo repelente del que usted presume tanto.

Ya sé que le importará un comino mi opinión (tampoco creo que llegue a leer nunca estas líneas) y menos aún le importará si un bloguero de tres al cuarto compra sus “obras”, pero ahí queda dicho.

PD: Sr. Vidal, escriba algo decente para variar y deje de jodernos esta España que es de todos. El día que realmente aporte algo de valor a la literatura estaré encantado de leer su creación. Mientras tanto, y permítame la licencia ya que a usted se las han permitido todas, entreténgase zurciendo sus calcetines y los de sus vecinos, que así seguro que no hace ningún mal a nadie.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Quizás te sorprenda, pero este erudito pasa muchas horas delante del ordenador y ha encontrado este blog de un tipo, como tú mismo dices, "del tres al cuarto". Tus palabras me parecen fruto de esta mierda de democracia que os permite a los rojos y a los enemigos de España hablar y opinar con libertad. Me tengo que ir. A mí lado espera una odalisca gorda para hacerme la danza del vientre y compartir conmigo mis abluciones diarias. Quizás luego, en un ratito que tengo libre antes de comer, escriba cinco o seis libros. Eres amigo de Zapatero.

Lord Derfel Cadarn dijo...

Bienvenido a mi blog, Césarvidal de España y de las JONS García. Me ha encantado tu comentario y estoy deseando que, entre bocado y bocado y entre fulana y putana, tengas algún ratito libre para seguir participando en este foro.

Anónimo dijo...

No me gusta nada tu verborrea prepotente y pseudo-progre, esa ironía que tratas de destilar. Seguro que eres masón. A los tipos como tú los retraté muy bien en mi magnífica obra sobre la masonería, allí desvelaba toda la verdad sobre vuestra peligrosa secta. Eres masón, como Zapatero, como Rubalcaba, como Bin Laden, como Boris Izaguirre. Veo que vives en Zaragoza. Yo solía ir por allí hace un tiempo, cuando tenías una estación de tren honrada y española, como era la de El Portillo y no ese mamotreto masónico e independentista que habéis montado ahora, Delicias, decís. En fin, yo solía ir a unas cabinas sex-shop frente a la Estación de El Portillo y alos puticlús de las bocacalles de la Avenida Valencia. En ellos escribí algunos libros, entre intento e intento de coito. No me gusta beber güisqui en los prostíbulos, esa mierda de moda extranjerizante, no me gusta, me gusta beber vino recio y brandy Duque de Alba, eso me gusta, no me gustas tú.

Lord Derfel Cadarn dijo...

Suave, suave Césarvidal de España y de las JONS García, que esto lo pueden leer los niños y me los va a asustar con sus cruzadas anti-juedomasónicas, y bastante tienen ya los pobres con Michael Jackson, como para que encima aparezca usted aquí a llenarles la cabeza de ideas raras.

PD: Esto de firmar en blogspot es una caca, porque si algún día quiere poner un comentario el aludido "real", cuando lo haga nadie creerá que es él y no Perico el de los Palotes (uy, qué mal suena eso de palote ¿no?)...

Anónimo dijo...

Tienes razón. Por eso no he firmado como César Vidal: por si el interesado quiere participar y, sobre todo, porque no voy a suplantar la verdadera personalidad de nadie escribiendo en su nombre cosas que él no ha escrito, ni ha dicho. Por eso tampoco voy a firmar este post como Michael Jackson (he estado tentado). Lo que he escrito tampoco hace referencia al César Vidal real, son sólo ejercicios humorístico-lietararios. No quiero con esto protegerme por si el Vidal real (que no Vidal Sasoon) leyera alguna vez esto. Desde aquí le digo que lo que pienso de él de verdad no tiene nada que ver con las simpáticas caricaturas que de él he hecho, sino que son cosas bastante más duras y más graves; pero ante personajes deleznables como él el mejor antídoto es el humor. Si tienes interés, César Vidal real, te puedo explicar detalladamente la opinión que me me mereces. Y ahora que parece que hablamos en serio, no me escondo: soy ENRIQUE CEBRIÁN ZAZURCA. ¡Dedícame un libro!

Anónimo dijo...

Ja, ja. ¡Qué cachondeo!

Anónimo dijo...

Hola, soy César Vidal Real.
QUe os folle un pez!!!!